Tras el repunte de la presencia de cebos envenenados o con clavos en diversos parques y zonas verdes de la ciudad, desde el Grupo Municipal de Ciudadanos se insiste en que sería positivo que la unidad ambiental de la policía local luche también contra este tipo de delitos.
“Ya lo planteamos sin éxito en diciembre de 2015, sin embargo ante el repunte de estos delitos creemos que el Ayuntamiento debería reconsiderarlo”, afirmó Fernández Sarasola.
En este sentido, recordó que son varias las ciudades de España que han creado dentro de la policía local unidades específicas para luchar contra el maltrato animal y han tenido notable éxito en la reducción de los delitos contra los animales.
“El coste de su puesta en marcha sería muy bajo dado que no conllevaría una ampliación de la actual plantilla de la policía local sino que simplemente bastaría con formar a los agentes de la unidad ambiental en este cometido específico”, explicó.
Además, se lamentó del importante incremento de los casos de maltrato animal, siendo relativamente frecuentes la aparición en parques y zonas verdes cebos envenados o con clavos. “Se trata de un problema social al que no podemos permanecer impasibles, no sólo porque la violencia contra un animal sea ya algo intolerable, sino también por la multitud de estudios que demuestran una clara correlación entre el maltrato animal y el maltrato a las personas”, añadió.
Además considera oportuno estudiar la posibilidad de entrenar a alguna de las unidades caninas de la policía local para la detección de estos cebos envenenados, algo que ya se hace por ejemplo en Zaragoza. “Con esta unidad canina especializada no sólo se protegería a los animales, sino también a los niños que juegan en parques y zonas verdes, y que pueden ingerir accidentalmente este tipo de camuflados en alimentos en aparente buen estado”, concluyó.