- Critican una política social basada en la beneficencia y en que “el primero que la pida se la lleva”
El Portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos, José Carlos Fernández Sarasola, ha cuestionado las nuevas bases de la Renta Social Municipal.
Así, en primer lugar, considera positivo que se haya redimensionado este programa pasando de los 8,1 millones de euros que sumaron las dos convocatorias celebradas el año pasado a una sola de 2,6 millones de euros, y, además, “lo que, sin duda, puede contribuir a hacer sostenible este programa y, en caso de ser aprobado, no comprometerá como hizo el año pasado el equilibrio presupuestario de nuestro Ayuntamiento”, explicó.
También consideró adecuado que se limite las cantidades máximas a conceder por beneficiario a 2.500 euros anuales, y que se hayan establecido controles adicionales para evitar la picaresca, como la necesidad de autorización previa para la compra de determinados productos como por ejemplo electrodomésticos, y la posibilidad de hacer inspecciones tanto en los comercios adheridos como en las viviendas de los beneficiarios.
“Todas estas modificaciones van en la línea de lo que siempre hemos defendido desde Ciudadanos, y vienen a reconocer que el programa era insostenible e inviable”, añadió.
Sin embargo, a pesar de estas modificaciones, siguen existiendo aspectos en las nuevas bases que impiden que la formación naranja vaya a apoyar este programa.
Así, siguen echando en falta medidas para facilitar la inserción sociolaboral de sus beneficiarios, reduciendo este programa a una simple ayuda económica, y, tampoco les gusta el hecho de que el criterio para seleccionar a sus beneficiarios, entre aquellos que cumplan los requisitos, sea el orden de solicitud en vez de priorizar aquellas familias que se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad, “especialmente aquellas que tienen niños”. Algo que también ocurre por ejemplo en las ayudas de alquiler.
“No podemos compartir una política social basada en la beneficencia y en que el primero que la pide se la lleva. Los recursos son finitos, hay que optimizarlos y hacer que sirvan para realmente ayudar la gente que más lo necesita a salir de las situaciones de precariedad en las que se encuentran”, concluyó.