- Pérez Carcedo echa en falta más empatía con un sector que ha sido de los más perjudicados por la pandemia.
Gijón, 8 de noviembre de 2021. El concejal de Ciudadanos, Rubén Pérez Carcedo, ha lamentado una vez más la falta de diálogo que caracteriza a este gobierno, en este caso por la vuelta a la normalidad de las terrazas, “que la Alcaldesa decretó el mes pasado sin ningún tipo de diálogo con el sector, en una muestra clara de su poco apego a la negociación y a la falta de empatía con un sector que ha sido de los más perjudicados por la pandemia al haber sufrido fuertes restricciones a su actividad e, incluso, cierres”.
En este sentido, se lamentó que, en Gijón, a diferencia de lo que ocurre en muchas otras ciudades en las que se ha negociado con el sector esta vuelta a la normalidad, se opte por la imposición en vez de por el diálogo y el acuerdo, “cuando esta medida se puso en marcha se habló con los representantes del sector hostelero y con los vecinos, no se entiende que para su reversión no se haya hablado con nadie y se haya impuesto de un día para otro, mientras que en la mayoría de las ciudades se ha optado por su flexibilidad, incluso muchas han pospuesto esta vuelta a la normalidad hasta el próximo año”.
Además, consideró que la normalidad solo se alcanzará, tal y como estamos viendo, a medida que los clientes vayan recuperando la confianza en los interiores, “algo que llevará su tiempo, por lo que no parecen adecuadas las prisas del gobierno para suprimir una medida que ha funcionado bien en la ciudad, sin apenas generar quejas ya que fue proporcionada y aceptada por la mayoría de los gijoneses que lo comprendieron”.
Así, señaló que a su juicio lo oportuno es sentarse a hablar, como se hizo para ponerla en marcha, con los representantes del sector hostelero y los vecinos para repensar esta vuelta a la normalidad y que resulte lo más beneficiosa posible para todas las partes, “los negocios hosteleros vienen de 18 meses pasándolo muy mal y todavía quedan muchos por delante antes de que se recupere la normalidad, no solo normativamente sino también en los hábitos de las personas”.